¿Conocen la frase “médico cúrate a ti mismo”? Casi de manera homónima se podría pensar en la resiliencia y el liderazgo.
¿Qué es la resiliencia? Es la capacidad que en mayor o menor medida tenemos todos de afrontar situaciones adversas, convirtiéndolas en alto positivo. Lo podemos pensar como una especie de reciclaje emocional o de autocuración. En la que intervienen, el aprendizaje, el manejo de las emociones y del estrés.
Y, si hay algo que un líder debe saber es afrontar son situaciones adversas, trabajar en entornos complejos y escenarios cambiantes. Por eso, la resiliencia es una capacidad fundamental para liderar.
Es la que permite el “filtrado” previo de las situaciones complejas y la posterior comunicación en versión adaptada al equipo. Una persona desbordada o desinteresada poca posibilidad tendrá de conducir un equipo.
¿Se trae o se desarrolla? Y esta pregunta es como la del huevo y la gallina, creemos que un poco de ambas, pero como las emociones no son un músculo no podemos afirmar que con el ejercicio se aprenderá a controlarlas y a menos a transformarlas en algo positivo. Hasta el momento no hay cursos ni entrenamiento para ser resilientes.
Siendo optimistas, pensamos que se puede aumentar el grado de resiliencia, es decir que una persona con baja resiliencia puede aumentarla a lo largo de la vida. Ya que todo lo que vivimos nos construye como personas en tanto nos va modificando.
¿Cómo reconocemos una persona resiliente? Es bastante sencillo, en el actuar cotidiano son personas que, frente a una situación difícil, buscan el atajo para salir, tratan de aprender y no llevan la presión que implica este movimiento a sus equipos o a otros colegas.
En general, son contenedoras y tienen una visión positiva aún de las cosas malas. Su lema sería de todo se puede aprender y eso en sí mismo ya es algo positivo.
Volviendo al comienzo y al título de la nota, las organizaciones cada vez más necesitarán líderes resilientes, justamente por lo que expresábamos al comienzo: los escenarios cambiantes, la incertidumbre y en el caso local las situaciones de crisis.