Gerardo Andreucci, TecnoVoz #28años: “Hoy nos preguntamos cómo podemos ayudar más”

Gerardo Andreucci, TecnoVoz #28años: “Hoy nos preguntamos cómo podemos ayudar más”

Esta frase resume la esencia de Gerardo Andreucci, director de TecnoVoz, empresa líder en tecnología para contact centers, que este julio festeja sus 28 años.

Quienes tenemos la fortuna de conocerlo sabemos que Gerardo es el primero en apoyar las iniciativas del sector, ya sean eventos, libros, cursos, premios. Como también, compartir una idea, una palabra de aliento cuando se necesita. Porque además de solidario es optimista y logra ver el lado positivo en todo. Es por lejos la persona que más ha hecho por el crecimiento de los contact centers en Argentina. Conversamos con él sobre los 28 años de “Tecno”, como él la llama, el viaje y el aprendizaje.

Contanos dos momentos bisagra de TecnoVoz, uno de crisis y otro de crecimiento

Gerardo Andreucci: Un momento crítico y otro de crecimiento confluyen, porque la crisis del crecimiento en las empresas es habitual y es lo más difícil de sobrellevar. En los inicios uno empieza con los niveles de arranque. Cuando se empieza a crecer de manera no planificada y desmedida, se cometen algunos errores por falta de planificación y experiencia de cómo manejarlo. Esto nos pasó en Tecno, en el momento que pegamos el salto más grande durante los inicios tuvimos que pisar el freno porque veíamos que las cosas se nos podían ir de las manos.

¿Qué les pasó?

Gerardo Andreucci: A fines de los 90 desembarcó Telefónica con la plataforma de Atento, era el primer call center en Argentina de ese volumen, 700 líneas y más de 500 puestos.  Fuimos elegidos para este desafío. Eso fue una revolución para el mercado local y también. Marcó un antes y un después para TecnoVoz, tanto a nivel empresarial como  tecnológico también, porque era la primera vez que este tipo de tecnología estaba ingresando en las grandes ligas (convergencia en redes de voz y datos). Nosotros empezamos a trabajar con direcciones IP diferenciándonos de la telefonía tradicional dominante en esos momentos, ante la novedad el mercado tenía sus reservas respecto a la estabilidad que este tipo de plataformas requiere. Sin embargo, la plataforma mostró una gran solidez y performance, ideal para la explosión telefonía IP que posteriormente se consolidó a nivel global

¿Y qué pasó después?

Gerardo Andreucci: A nivel tecnológico nos puso como pioneros y jugadores de las grandes ligas con el espaldarazo financiero y marketinero que esto tiene. Haber ganado un negocio así ante otros vendors consolidados como “monstruos sagrados” de la tecnología, y en una compañía como Atento, fue un golpe de gracia muy grande. Nos significó un desafío enorme, que pudimos superar con muy buenos resultados, pero, por otra parte, quedamos limitados en nuestra capacidad de reacción ante nuevos emprendimientos ya que la mayoría los recursos que teníamos estaban abocados a ese proyecto titánico.

En una oportunidad [cuando hicimos el libro] me dijiste “disfrutá el viaje, imagínate que vas en una lancha y mirá la estela de agua que va quedando en trayecto. Vos, ¿Qué disfrutaste del viaje de TecnoVoz?

Gerardo Andreucci: De este viaje lo primero que disfruté fue entender el sentido integral de una empresa. Una empresa no es solo un negocio, es un emprendimiento de mucha gente con un mismo objetivo. Por supuesto que sin proyectos, expectativas y valores no funcionaría. Por eso cuando nosotros tenemos que contratar gente (esta es una empresa de tecnología), y necesitamos gente con capacitación tecnológica, a la hora de sumar colaboradores al equipo hacemos más foco en los valores que en los conocimientos técnicos. Por supuesto que los deben poseer en un determinado grado, pero en aquellos que muestren ciertas falencias se los puede capacitar, ese aprendizaje puede y debe suceder .  Pero los valores que no se traen de base son intransferibles. Vienen con la educación, la familia y la persona. Y una empresa no puede inculcar valores, lo que puede es sostener valores.

Entonces lo primero que vemos es que las personas compartan esos valores, y eso hizo que la empresa tenga gente con mucha antigüedad por ende con muy baja rotación.  Hay personas que llevan más de 25 años de trabajo en Tecno, otros que se jubilaron trabajando en la compañía. Y ahora vemos la convivencia generacional de “los históricos” con colaboradores que se inician, algo que antes no pasaba porque todos eran de un rango etario similar.

¿Cómo transcurre esa convivencia multigeneracional?

Gerardo Andreucci: Es interesante y para eso se necesitan valores: respeto, solidaridad, y ahí es donde corroboramos nuestro acierto. A nivel de integración estamos muy contentos. Por eso tengo la convicción que eso es una empresa, es el emprender todos juntos. No son un grupo de iluminados que se juntaron y descubrieron la verdad. Es gente que tuvo una visión, la compartió, y la pudo hacer común a un grupo de gente ¿Solo? No podría.

Tecno, cumple 28 años en Argentina ¡Doble mérito!

Gerardo Andreucci: [Risas] Y los últimos 28 años de la Argentina, han sido muy intensos. Más lo que ha traído el mundo últimamente, más la pandemia con su impacto sanitario y psicológico. Desde nuestro lado la fortuna nos acompañó un poco porque esto aceleró el tipo de negocio en el cual nos desarrollamos. Pero también vemos que muchas empresas con las que trabajamos hace años, están pasando un momento difícil y esto no está bueno. Sentirse en la orquesta del Titanic no es una sensación agradable. A veces llevás a la compañía a esfuerzos más grandes de los que figuran en los manuales de gestión, con el objetivo de acompañar a los clientes. Hoy nos preguntamos cómo podemos ayudar más.

¿Qué agradecés?

Gerardo Andreucci: Todo, la vida agradezco y empieza por lo personal. Soy una persona feliz, siempre lo he sido. Entiendo que la felicidad no es una meta, sino una construcción permanente a lo largo de la vida, y no se detiene, es continua. Disfrutar en esa constante tarea es aquello que más valoro y agradezco .Indudablemente entre esas construcciones está TecnoVoz, ser parte de TecnoVoz, es algo que ha sido y es parte de mi felicidad.